Escribir y leer la vida
Una pluma, un papel y palabras que fluyen.
Decía Virginia Wolf que "escribir constituye el placer más profundo, que te lean es solo un placer superficial".
Estos días que se nos presentan con tiempo para nosotros:¿porque no sumarnos al placer de escribir?
Los neurólogos afirman que, en tiempos de tecnología, escribir es más que una medicina. Tomarse un tiempo para, cada día, anotar con pluma y papel sentimientos, recuerdos de viajes imborrables, caminos por recorrer o sueños por cumplir será un sano ejercicio. Provocará en nuestro cerebro un extraordinario aumento de endorfinas. Un gesto que nos mantendrá activos y sumará neuronas felices.
Un buen amigo, una persona especial, mantiene la costumbre de anotar cada jornada una palabra en su agenda vital. Pero no crean que una cualquiera. Recopila vocablos de uso poco común. Por ejemplo: inmarcesible.
Elegante amigo e inteligente ejercicio que mantiene su mirada con un brillo extraordinario.
Por delante tenemos días para viajar, pasear sintiendo como la arena acaricia nuestra piel, respirando el aire más puro, reflexionando solos o en compañía,... Horas en las que hallaremos nuevas voces que hablaran de sueños y emociones, de instantes vividos apasionadamente. Verbos para escribir con mayúsculas.
Cuando las circunstancias nos hacen parar y reflexionar sobre lo vivido, es magnífico releer lo manuscrito. Viendo lo anotado sentiremos que nuestro viaje a Itaca ha sido más positivo, mejor y más feliz de lo que imaginamos.
Hoy, como el elegante amigo, tomaremos pluma , papel y escribiremos nuestros sueños. Olvidaremos asuntos de titulares políticos, económicos, sucesos inexplicables y nos dedicaremos a las palabras que de verdad nos apasionan.
Como decía Umbral: "escribir es la manera más profunda de leer la vida".
Instantes inmarcesibles...
Decía Virginia Wolf que "escribir constituye el placer más profundo, que te lean es solo un placer superficial".
Estos días que se nos presentan con tiempo para nosotros:¿porque no sumarnos al placer de escribir?
Los neurólogos afirman que, en tiempos de tecnología, escribir es más que una medicina. Tomarse un tiempo para, cada día, anotar con pluma y papel sentimientos, recuerdos de viajes imborrables, caminos por recorrer o sueños por cumplir será un sano ejercicio. Provocará en nuestro cerebro un extraordinario aumento de endorfinas. Un gesto que nos mantendrá activos y sumará neuronas felices.
Un buen amigo, una persona especial, mantiene la costumbre de anotar cada jornada una palabra en su agenda vital. Pero no crean que una cualquiera. Recopila vocablos de uso poco común. Por ejemplo: inmarcesible.
Por delante tenemos días para viajar, pasear sintiendo como la arena acaricia nuestra piel, respirando el aire más puro, reflexionando solos o en compañía,... Horas en las que hallaremos nuevas voces que hablaran de sueños y emociones, de instantes vividos apasionadamente. Verbos para escribir con mayúsculas.
Cuando las circunstancias nos hacen parar y reflexionar sobre lo vivido, es magnífico releer lo manuscrito. Viendo lo anotado sentiremos que nuestro viaje a Itaca ha sido más positivo, mejor y más feliz de lo que imaginamos.
Hoy, como el elegante amigo, tomaremos pluma , papel y escribiremos nuestros sueños. Olvidaremos asuntos de titulares políticos, económicos, sucesos inexplicables y nos dedicaremos a las palabras que de verdad nos apasionan.
Como decía Umbral: "escribir es la manera más profunda de leer la vida".
Instantes inmarcesibles...
Comentarios
Publicar un comentario