Terrer, auténtica revolución

Terrer, cinco de la tarde. Grupos de familias y amigos con el mismo destino: la piscina. En el ensombrado de la cafetería el rabino o el guiñote protagonistas de las mesas . Dos turistas accidentales, la corriente natural de aire mitigando el calor y presidiendo el pueblo el soleado "corazón de Jesús".

Tranquilidad absoluta, el mundo parado ante amigos que se reúnen en torno a una paella, contando  ingeniosas aventuras en campos de fútbol; los abuelos rejuvenecen acompañando a los pequeños a nadar y los adolescentes se enamoran por primera vez. El mundo se detiene en Terrer hoy y mañana para quien allí vive o disfruta de vacaciones. Y lo mismo ocurrirá en Valmadrid, Castelserás,  Lécera,… Es la otra cara del LP , la mejor grabada.

Seguimos impactados por las imágenes de Niza, por un mundo en permanente conflicto real y virtual, pero mientras tanto en Terrer hoy a la misma hora: piscina, cartas y mirada al turista. Ésa es la auténtica revolución. Es el ansiado cambio que todos deseamos.

" La auténtica revolución es la paz " decía Pi y Margal.

El mundo se pelea por imposición de creencias. Mientras tanto en la piscina de Valmadrid en una mesa toman café y charlan, mujeres de tres nacionalidades, costumbres y religiones diferentes con absoluta normalidad.

Hoy en alguna empresa se estará discutiendo por matices a la hora de vender más. Mientras tanto un panadero en Castelserás continuará sonriendo a los habituales que compran y aprecian sus buenas barras.

Desde luego no podemos olvidar nuestras obligaciones y responsabilidades pero si aprovechando el estío, podríamos durante unas horas, parar el tiempo e iniciar esa revolución enorme que es dar y darnos paz..

Las Pedrosas, agricultores, dulzura y ternura, tertulia y la felicidad de parar el mundo en el ensombrado o sonriendo al observar como florecen las orquídeas. En los rincones más cercanos  son días de "la revolución de la paz".